Hoy la ruta transcurría serpenteando alrededor de la I-40, lo que producía una sensación extraña, ya que vas conduciendo por una carretera, prácticamente solo, y al lado hay una autopista de tres carriles atestada de camiones. Para que no nos aburriéramos, el TomTom (alias Ton-Torrón) ha decidido llevarnos a través de un barrio estilo el Bronx y por el cementerio de St Louis, y más tarde nos ha hecho dar un rodeo de varios km. para acabar en un puente cerrado por obras. Al final hemos optado definitivamente por ignorarlo y llevarlo solamente a modo de salvavidas para saber por que carretera vamos. Para seguir la 66, con los carteles azules de Missouri tenemos bastante.
La siguiente parada ha sido una visita a las Meramec Caverns, una cueva de varias millas de extensión que, entre otras cosas, se supone fué el escondite de Jesse James. Después de haber estado el año pasado en La Cueva de Los Verdes, en Lanzarote, la impresión ha sido que los Americanos tienen cierta tendencia al cutrerío y una visión muy peculiar de como preservar los espacios naturales. A pesar de todo, esta cueva guarda rincones de una belleza espectacular, así como algunas rarezas destacables, como una gran cortina de estalactitas con forma de cascada o una estalagmita de varios metros de altura y diámetro.
Como nunca habíamos estado en un autocine, hemos ido a buscarlo al pueblecito de Cuba. Gracias a las indicaciones precisas del Ton-Torrón, nos hemos perdido en una carretera secundaria. Al rato de dar vueltas nos hemos dado cuenta que un coche nos seguía. Nos disponíamos a dar media vuelta en un descampado cuando prácticamente nos ha cerrado el paso. Pues bien, se trataba de una mujer que había visto que íbamos muy perdidos y no ha parado hasta averiguar qué andábamos buscando. No sabemos si lo ha hecho por desconfianza, por curiosidad o realmente era una buena samaritana con ganas de ayudar al prójimo. El caso es que gracias a sus indicaciones hemos podido echarle un par de fotos al viejo autocine.
Y hablando de indicaciones, es una exageración la cantidad de carteles ENORMES que hay en todas partes. Cada hotel, fast-food, gasolinera o atracción turística tiene su poste de 20 metros de altura con el anuncio de su negocio a todo color. La saturación en algunos puntos es increíble. ¿De verdad alguien puede asimilar tal cantidad de información mientras va conduciendo?
Para acabar la jornada, al lado de nuestro hotel, en Rolla, nos hemos topado con el negocio mas antiguo del estado de Missouri, el Totem Pole. Una antigua gasolinera-hostal-restaurante que data del año 33 y en la que hasta hace 7 meses aún era posible repostar. El propietario nos ha explicado que ya no podía competir en precio con las grandes petroleras y ha decidido quedarse solamente con la tienda de souvenirs.
No nos vamos a engañar, la Ruta 66 se está convirtiendo cada vez mas en una especie de marca registrada y mucha gente vive de ello a lo largo del camino. El logotipo vende y está en todas partes, así como el merchandising mas o menos oficial y uniforme en muchas de estas tiendas de souvenirs. Realmente el encanto está mas en los viejos comercios y en sus propietarios que no en lo que éstos nos puedan intentar vender.
El dueño del Totem Pole nos ha estado hablando también del tornado de Joplin de hace unas semanas, el mas grande de la historia de los EEUU, y se ha alegrado por nosotros cuando le hemos dicho que en España no tenemos tornados. La verdad es que nos da un poco de miedo lo que nos podamos encontrar pasado mañana en esa ciudad, antes era parada obligatoria en nuestros planes, pero ahora habrá que ver que es lo que queda de ella.
Día 4: Lincoln - St. Louis El día ha amanecido lluvioso, restos de una fuerte tormenta que ha caído durante la noche. Hemos alucinado al entrar en nuestro primer supermercado grande del viaje... |
Día 6: Rolla - Springfield Seguimos avanzando por el estado de Missouri. Desde que ayer entrásemos en este estado, hemos notado que el paisaje es bastante diferente al de Illinois... |
No hay comentarios:
Publicar un comentario